EL SIMBOLISMO DE LOS PUNTOS CARDINALES

Las iglesias cristianas están orientadas con su cabecera hacia el

Este, (hacia el lado del sol naciente, oriente). Este uso se generaliza a partir del siglo IV. La manera en la que se orientaban las iglesias dependía del punto del horizonte donde asomaba el sol el día que se celebraba la festividad correspondiente a la dedicación del templo, por ejemplo, el día del santo al que se dedicaba la iglesia.

El Oeste (poniente, occidente, por donde el sol se oculta), es considerando, por el contrario, como el reino del anticristo, de las tinieblas y de la muerte; por eso el muro de la fachada occidental se reserva para la representación del Juicio Final.

El Norte, que es la región de la oscuridad y de las escarchas, está dedicado a Satanás. Según las reglas litúrgicas, el baptisterio debe estar situado en el norte de la iglesia, porque ese lado es la región de las tinieblas donde se sumergen los neófitos antes de su purificación por el bautismo.

El Sur (mediodía), de donde vienen la luz y el calor, evoca, por el contrario, la idea del Cristo Salvador, del reino de la Gracia.

 
Esta oposición determina,,que al entrar el fiel en la iglesia tenga el Norte a la izquierda y el Sur a su derecha.