2.2.- Inteligencia

La inteligencia, según Piaget, es la capacidad de adaptarse al ambiente y su desarrollo pasa por una serie de etapas de maduración.

a. Período sensoriomotriz (hasta los 2 años).
Se ponen las bases psicomotoras y manipulativas para la posterior adquisición de las mecánicas lectoras en la siguiente etapa.

b. Período del pensamiento preoperatorio o inteligencia intuitiva (2-7 años).
Hay un progreso enorme en todos los aspectos de comunicación y también en la adquisición de diversas habilidades numéricas. Se desarrolla el lenguaje, la capacidad de comprender conceptos sencillos y la capacidad de ver en un objeto la representación de otro. Coincide con el 2º ciclo de la Educación Infantil y los dos primeros niveles de la Educación Primaria. Se ponen las bases de la lecto-escritura y al finalizar esta etapa se dominan las destrezas mecánicas que van a marcar el desarrollo lector del sujeto, sus progresivas capacidades comprensivas y expresivas, determinando a su vez su facilidad para acercarse al currículo académico y, en suma, su éxito o fracaso escolar. Las estrategias de enseñanza y aprendizaje en Educación Infantil y en los dos primeros niveles de Educación Primaria se erigen en predictores importantísimos de lo que serán a posteriori las capacidades verbales y de comprensión lectora del adolescente.

c. Etapa o período de las operaciones concretas ( 7-11 años).
Se produce un avance en la objetivización del pensamiento, no limitado a su propio punto de vista. Su pensamiento es concreto y sólo alcanza a la realidad que puede ser manipulada. Puede realizar seriaciones y clasificaciones. La comprensión en la lectura es, pues,  muy concreta y de ahí que las respuestas a preguntas sobre la misma tengan que ser literales. A nuestro modo de ver es el período en el que se han de fijar los mecanismos lectores, la técnica lecto-escritora, diríamos. La memoria tendrá un papel importante. El énfasis habrá de ser puesto en la fluidez, la entonación, las pausas, la auto-escucha y también en la comprensión. Estudios recientes ponen de manifiesto cómo la fluidez lectora, la buena entonación y la adecuada secuenciación de la lectura en alta voz son predictores positivos de una buena fluidez y adecuado dominio de la lectura comprensiva  en etapas posteriores.

d. Período de la inteligencia lógico-formal (a partir de 11 años).
La capacidad cognitiva puede operar con símbolos. Puede realizar juicios hipotético-deductivos.br /> Es capaz de realizar abstracciones y de utilizar un razonamiento deductivo. En el proceso de desarrollo lector, si se ha actuado correctamente en las etapas anteriores, será el momento de poner el énfasis en la lectura comprensiva, en la creación de los hábitos lectores, en la identificación de claves que permitan la adquisición de estrategias que hagan más fácil todo el entramado de la comprensión textual. Habrá que tener en cuenta la cuestión volitiva de la motivación a la hora, particularmente, de la elección de los textos, valorando la edad y los intereses del adolescente sin por ello renunciar a su introducción progresiva en los autores denominados clásicos.  

En este desarrollo de la comprensión lectora, con el alumnado adolescente nos encontraríamos en el momento de poder empezar a realizar deducciones y a comprender lo que está implícito en el texto.