Orientaciones metodológicas

El proceso a seguir por el profesorado puede ser el siguiente:

  • Motivación hacia la necesidad (utilidad) de trabajar la comprensión lectora.
  • Definición explícita de las estrategias: cuáles son y en qué consisten.
  • Modelado del profesor: Ejemplificar con un texto conocido. El profesorado debe verbalizar los procesos internos que utiliza en su comprensión lectora: preguntar por qué va a leer el texto, formularlo de formas distintas, pensar en voz alta, detenerse después de cada párrafo, hacer predicciones y explicar si se cumplen o no, manifestar dudas y explicar cómo las resuelve, autocuestionarse, buscar información,…
  • Práctica dirigida. Individual o en grupos. El profesorado ofrece andamiajes para una mejor comprensión y control. Se pretende que los alumnos puedan comprobar si han entendido las estrategias y si son capaces de ponerlas en práctica. Lo hace progresivamente dando mayor libertad (con preguntas abiertas) a que el estudiante participe en el uso de la estrategia que le facilitará la comprensión del texto.  De los aciertos y errores en estas prácticas puede aprender todo el alumnado.
  • Práctica independiente, en casa o en clase. Primero en clase, bajo la supervisión del profesorado.
  • Autoevaluación por parte del alumno sobre su propio trabajo.
  • Valoración y aportaciones del profesorado.
  • Es conveniente utilizar distintos tipos de textos, de dificultad progresiva, de áreas, asignaturas y situaciones diferentes, hasta conseguir entre todos que el alumnado quede expuesto a muchas y diversas  prácticas de lectura: textos continuos y discontinuos, texto de ámbito personal, social, académico,....